Sylvia Plath La poeta y novelista Sylvia Plath, aunque murió joven en 1963, dejó testimonios en sus diarios y cartas sobre periodos prolongados en los que trabajaba desde la cama, vestida con ropa de dormir, mientras criaba a sus hijos y escribía La campana de cristal. Durante el invierno de 1962–1963 en Londres, tras la separación de Ted Hughes, Plath escribía de madrugada en pijama, en una casa helada, produciendo algunos de sus poemas más intensos. Aunque no fueron diez años, su rutina de escritura en ropa íntima se volvió icónica entre escritores. Para ella, el pijama no era pereza, sino una forma de crear un espacio sagrado en medio del caos emocional y doméstico. Su legado muestra cómo la vulnerabilidad física—estar en pijama—puede ser el caldo de cultivo para la expresión artística más cruda. Plath representa a quienes convierten lo doméstico en escenario de batalla interior.
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